Flexibilidad con responsabilidad, productividad con inclusión
Por Octavio de la Torre de Stéffano, Presidente de Concanaco Servytur
Es importante reconocer la importancia de avanzar hacia modelos laborales más humanos y sostenibles, como lo ha planteado el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum. Sin embargo, es fundamental que dicha transición tome en cuenta la enorme diversidad del tejido productivo mexicano. En el comercio, los servicios y el turismo —sectores intensivos en atención directa y en horarios extendidos— se requiere una implementación diferenciada y flexible que no ponga en riesgo el empleo ni la operación diaria de millones de negocios familiares.
Reducir la jornada laboral es un ideal loable. Pero la verdadera prosperidad compartida no se logra con un calendario único, sino con políticas que entiendan las diferencias entre sectores y regiones. Plan México lo dice claro: nadie debe quedarse atrás. Por eso, necesitamos una transición que no castigue a quienes ya operan al límite.
Una propuesta de un nuevo pacto social basado en empleos dignos, pero también en empleadores sostenibles. Para lograrlo, la reducción de la jornada laboral debe venir acompañada de políticas que fortalezcan a las micro y pequeñas y medianas empresas, como acceso a crédito, reducción de impuestos, subsidios al empleo y simplificación administrativa.
En Concanaco Servytur al ser una organización con liderazgos en territorio, creemos que el trabajo digno no se decreta: se construye. Y se construye con productividad, formación y condiciones reales. Claro que estamos ante una oportunidad para repensar la jornada laboral, sí, pero también para impulsar la productividad con arraigo territorial. No hay desarrollo nacional sin negocios familiares formales y fuertes en cada comunidad.
Reducir horas puede funcionar en fábricas con turnos, pero en un restaurante de 10 empleados o una tienda de barrio, eso puede romper la operación. Cualquier plan se basa en identificar que hay muchos Méxicos. Hoy necesitamos políticas laborales con rostro comunitario, que entiendan cómo funciona la economía en el territorio.
Desde Concanco Servytur vemos con buenos ojos los esfuerzos por mejorar las condiciones laborales en México. Coincidimos en que la productividad no debe estar reñida con el bienestar. Pero también sabemos que la realidad de un comercio en Oaxaca o un pequeño hotel en Chiapas no es la misma que la de una planta ensambladora en el norte del país. Por eso, creemos que el modelo de transición hacia jornadas reducidas debe ser flexible, gradual y sectorial.
Estamos listos para diseñar juntos una ruta que no solo cumpla con los objetivos sociales de la reforma, sino que los haga viables en todos los rincones del país. No queremos frenar el cambio: queremos que el cambio funcione para todos.
¡Llegó la hora del 99.8 por ciento! Llegó la hora de las empresas con rostro y comunidad.
Fuente: Milenio